Cuando el sol se oculta, Puerto Varas continúa brindando servicios gastronómicos y entretención para sus habitantes y visitantes. Comida, bebida, música en vivo y baile son los elementos que componen la bohemia local a través de Club Orquídea y La Buena Vida de Puerto Varas, entre otros oferentes.
Ambos emprendimientos con identidad sureña, desarrollados por puertovarinos y atendidos por sus propios dueños que buscan ser un referente del trasnoche del sur de Chile. Conversamos con los empresarios sobre su oferta, servicios, modelos de negocios, objetivos, metas y sueños.
Club Orquídea
María Soledad Sandoval socia del Club Orquídea nació en Ancud, Chiloé, cursó sus estudios de Técnico en Administración de Empresas en Puerto Montt y es madre de una pequeña de 7 años. Hace dos años regresó al sur, desde Santiago, para cumplir el sueño de emprender en su tierra natal. Es así que junto al destacado futbolista local Marcelo Teuber relanzaron la marca Club Orquídea Puerto Varas.
“Inauguramos la segunda semana de enero de 2017 y la tercera semana de febrero se nos quemó el tercer piso. Tuvimos harto apoyo del equipo de trabajo y de la comunidad en general lo que nos dio fuerzas para salir adelante rápidamente. De lo negativo siempre sale algo positivo puesto que a raíz del incendio surgió el proyecto de convertir el tercer piso en un sector Bip” explicó Soledad.
El renovado Club Orquídea cuenta con capacidad para más de mil personas, mayores de 23 años, un equipo de trabajo compuesto por 20 profesionales de la bohemia, 11 Djs, dos pistas de baile, dos terrazas para fumadores y un balcón, aire acondicionado, sistema eléctrico renovado y 64 cámaras de seguridad, dentro y fuera del local, para brindar mayor seguridad a los clientes. Abre sus puertas de lunes a sábado a las 19:00 horas y los fines de semana se cierran a las 4:45 horas en punto.
“De martes a jueves trabajamos con un piso y una terraza y de viernes a sábado trabajamos con los tres pisos y las dos terrazas. Si bien nuestro fuerte es el baile, invitamos al público para venga más temprano a disfrutar de nuestra gastronomía en la previa. Tenemos dos ambientes uno donde el fuerte es el baile en el segundo piso y en el primer piso principalmente bar con una oferta musical diferente” explicó la emprendedora.
La Buena Vida
En la bohemia puertovarina los clientes suelen rotar entre los diferentes exponentes del trasnoche local. A pocas cuadras del club se encuentra La Buena Vida, un espacio cultural con música en vivo que incentiva a los músicos locales y nacionales.
El espacio cultural nació de la mano de los hermanos Sebastián y Rodrigo Herrera Bustos, puertovarinos que en 2013 emprendieron en la costanera de Puerto Varas con una propuesta novedosa de música en vivo que poco a poco fue tomando forma. El año 2016 abrió sus puertas una renovada La Buena Vida, en pleno centro de la ciudad, con una infraestructura diseñada y construida específicamente para la oferta de gastronomía, bar, música en vivo y baile.
“Queremos que todas las generaciones puedan venir a pasar un rato agradable en nuestro local, hijos, padres y abuelos. El sábado pasado habían unos viejitos de 85 años celebrando hasta las 3 de la mañana, que rico que se sientan cómodos, que no les va a pasar nada en el baño. Queremos que sea un lugar muy transversal. Tengo 30 años y feliz puedo carretear con mi papá que tiene 60 años” explicó Sebastián Herrera de La Buena Vida, que se caracteriza por ofrecer todas las noches música en vivo: Martes de karaoke, miércoles de Tango, jueves, viernes y sábado, más música en vivo, y fiesta.
Tanto Club Orquídea como La Buena Vida son propuestas del trasnoche con identidad sureña y atendidos por sus propios dueños. Puertovarinos, sureños y visitantes está todo garantizado para que hagan de su trasnoche algo agradable entre amigos, familiares y por qué no, nuevos amigos.
