Universitarios representantes de Punta Arenas, Osorno y Puerto Montt se reunieron para ser parte de la Escuela de Líderes. El encuentro que se desarrolla en dos jornadas es organizado por la Dirección de Asuntos Estudiantiles(DAE) de la Universidad Santo Tomás. Busca entregar herramientas a los estudiantes orientadas a reforzar y profundizar en la dimensión personal y racional del liderazgo.
09.06.2022
Por Karin Antilef
Felices de poder reunirse físicamente y con todas las ganas de adquirir nuevos conocimientos, estudiantes de Santo Tomás de las sedes de Osorno, Punta Arenas y Puerto Montt se reunieron en la Escuela de Líderes. La que se ejecuta en Punta Larga, Frutillar y que contempla dos días llenos de actividades.
Este tradicional evento lo organiza la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAE). Busca entregar herramientas a los alumnos, orientadas a reforzar y profundizar en la dimensión personal y racional del liderazgo. Las que permitan ampliar sus competencias de relacionamiento, impacto e influencia. Además de desplegar la capacidad de impulsar el liderazgo de otros en la comunidad educativa de Santo Tomás.
Así lo explicó Eugenio Larraín, Rector de instituciones Santo Tomás sede Puerto Montt. “Nuestro deber es formar personas líderes para su desarrollo personal, familiar. Pero también para que cuando se integren como profesionales en la sociedad puedan ser un aporte valioso a ella. Por otra parte, estamos totalmente contentos de recibir a las delegaciones de otras sedes para que trabajen en este primer encuentro de forma presencial luego de dos años. Lo que va a permitir que los estudiantes se puedan conocer, conversar, trabajar en conjunto. Intercambiar opiniones y formar redes para que en el futuro puedan ayudarse mutuamente”, sostuvo.
Enrique Caico, director de DAE sede Puerto Montt manifestó la importancia de la Escuela de Líderes para los estudiantes. “Un programa de esta índole le ayuda muchísimo a su formación personal. A que ellos vayan creando sus propias ideas, haciendo proyectos, siendo mejores personas, aprendiendo a ser esforzados, a tener valentía en la vida afrontando los obstáculos. Y, por otro lado, en lo profesional, refuerza mucho el ser líderes en su trabajo, en su quehacer profesional, dedicarse a algo que les gusta. Ser los mejores en guiar a otros en el buen camino y en su disciplina, ser reconocidos por su responsabilidad, esfuerzo y perseverancia”, dijo.
Generar redes
Camila Oyarzún, estudiante de Licenciatura en Trabajo Social de la sede Puerto Montt contó que se inscribió en Escuela de Líderes porque “considero súper importante poder capacitarnos y potenciar nuestras habilidades. Que la Universidad nos otorgue la posibilidad de generar nuevas herramientas y trabajar las propias es algo que hay que aprovechar. Además, en un futuro profesional es importante contar con las bases que permitan guiar un grupo, fomentar las habilidades de este, conocer las necesidades y ser capaces de generar una sociedad donde todos podamos decir lo que pensamos y sentimos. Siento que eso es lo que hace un buen líder”.
Por su parte, Anais Ortega que cursa segundo año de Terapia Ocupacional en la sede Osorno busca desarrollar mucho más sus habilidades. “Siempre en mi vida estudiantil me he preocupado de esta formación complementaria. Desde el colegio he participado de otras escuelas en Osorno y fuera de la comuna. Lo importante es formar redes dentro de la Universidad ahora. Ya que después en la vida laboral uno no sabe hacia dónde va el destino. Entonces es bueno siempre tener contactos, hacer lobby con muchas otras personas, así poder avanzar, brillar y liderar mucho mejor”, dijo.
Escuela de Líderes
Manuel Rojas, estudiante de Ingeniería en Ejecución en Administración de la sede Punta Arenas indicó que “esta actividad para mí es muy buena porque me ayuda a alimentar los conocimientos que ya estoy adquiriendo en mi carrera. Siento que la institución está haciendo que sus estudiantes avancen dándoles estos espacios y oportunidades porque el tema del liderazgo es muy importante. Si lo laboral lo permite no quiero ser un jefe. Quiero llegar a ser un líder, tener un buen equipo de trabajo, que la gente que esté a mi cargo sepa que puede contar con la preocupación de una persona, que no a ser más importante el cargo que lo que les pase. Esta es una oportunidad muy buena para aprender también de autoconocimiento y absorber información”.
Describir las fortalezas y debilidades relacionadas a las capacidades y habilidades de liderazgo, a partir de proceso de autorreflexión. Analizar las oportunidades de mejora que permita la gestión emocional, según las condiciones del contexto. Identificar la dimensión relacional de liderazgo, como elemento relevante del proceso de influencia, según las condiciones del contexto. Desplegar habilidades conversacionales para resolver de manera colectiva los problemas que enfrenta el equipo, en función de los objetivos planteados, según las condiciones del contexto. Son parte de los lineamientos a trabajar en estos dos días.
