Las familias manifiestan que, con el cierre del camino privado que comunica este sector con la ciudad, se han visto expuestos a accidentes de tránsito, pagos excesivos en los peajes y una pérdida de calidad de vida para los niños de la comuna.
07.06.2021
Por Jorge Ahues
Indignados y pidiendo una solución a las autoridades se han manifestado más de 200 familias del sector de Molino Viejo de Puerto Varas, luego de que el camino privado -propiedad de Julio y José Antonio Opazo- fuera cerrado uniformemente impidiendo el normal tránsito de los residentes de los loteos de Puerto Varas Norte, Viento Sur, Viento Norte, Viento Puelche, Barlovento y El Laurel.
Los residentes alegan que, luego de que se instalara un portón que impide el acceso al camino, han aumentado los accidentes de tránsito en la ciudad, la congestión vehicular en el sector Línea Nueva y los tiempos de traslados para llevar a los niños al colegio. Todo lo anterior, sumado a que en 2020 llegaron 6.000 nuevos habitantes a la comuna.
José María de Ferrari, vocero de la comunidad, señala que es fundamental que las nuevas autoridades de la ciudad intercedan en esta crítica situación que les ha afectado su calidad de vida. “Hacemos un llamado al alcalde electo, Tomás Gárate, para que nos ayude con el único acceso que tenemos a Puerto Varas”, enfatiza.
De Ferrari lamenta que una mala planificación urbanística tenga a cientos de personas sufriendo las consecuencias de esta mala decisión. “Anteriormente José Opazo estableció un cobro para los vecinos, mediante un control remoto, pero hoy inexplicablemente nos prohíbe el paso directo a Puerto Varas”, recalca.
Finalmente, los vecinos revelan que han propuesto una serie de medidas para la apertura del portón en donde cada uno de los loteos se han hecho presentes con representantes. “El objetivo es que solo los residentes podrán hacer uso del camino, estableciendo un contrato que excluya de toda responsabilidad a los dueños ante algún accidente y también un pago mensual para el libre tránsito”, indican.