Prácticamente sin previo aviso, el volcán Calbuco inició su última erupción el 22 de abril de 2015. Desde el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) la considera una erupción significativa ya que solo tres horas antes presentó un enjambre sísmico que generó la erupción, fenómeno que no se había visto, incluso, a nivel mundial. Esto ya que el volcán erupcionó en alerta verde, dentro del ranking de categorías de riesgo que tiene el Observatorio Vulcanológico de los Andes del Sur. Se cumplen siete años de aquella emergencia volcánica que dejó estragos en la localidad de Ensenada y alrededores.
10.10.2022
Por Francisca Vargas
El Observatorio Vulcanológico de los Andes del Sur depende del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) y fue creado en 1996. El Observatorio realiza monitoreo y evaluación de peligros volcánicos para contar con información que permita apoyar a las autoridades en caso de emergencias volcánicas, entregando alertas tempranas y delimitando acciones. Desde la región del Maule al sur se concentran los volcanes de alto riesgo. Uno de esos es el volcán Calbuco, que erupcionó con poco aviso previo en abril de 2015.
Álvaro Amigo, subdirector de Geología de Sernageomin, conversó con Diario Puerto Varas sobre este volcán que cumplió siete años desde su última erupción. El volcán Calbuco está ubicado a unos 30 km al noreste de la ciudad de Puerto Montt y 30 km al este de Puerto Varas. Presenta glaciares pequeños en la cima, aunque durante la etapa invernal es ampliamente cubierto por la nieve sobre la cota 1.000m. El macizo tiene 2.003m de altitud y los centros poblados más cercanos son Ensenada, Puerto Varas, Chamiza, Río Blanco, Puerto Montt, Lago Chapo, Colonia Río Sur, Correntoso. Localidades que podrían sufrir los estragos de una nueva erupción.
¿Cómo cambió el volcán Calbuco?
“La erupción de 2015 en realidad no fue una erupción que produjera demasiados cambios. Sí en la zona muy cercana al cráter es diferente a lo que había previo al 2015, pero como edificio volcánico no tuvo mayores cambios y variaciones como sí hemos observado en otros lugares donde han ocurrido erupciones más grandes. Lo curioso del volcán Calbuco es que es un volcán muy silencioso, en términos de su actividad interna. Da muy pocas señales. Luego de esta reactivación en el año 2015, rápidamente a los pocos meses volvió a su característica normal de silencio”.
“Eso nos dio una gran lección, en el sentido que es un volcán de comportamiento diferente al resto de los otros volcanes donde hemos observado erupciones, que nos van dando señales con días y en algunos casos meses de anticipación. En el caso del Calbuco fueron solo con pocas horas y por lo tanto, la gran lección para nosotros es que si vemos nuevamente una escalada de actividad interna, sobre todo sísmica, temblores, vamos a reaccionar mucho más rápido de lo que se hizo el 2015”.
“La erupción tuvo dos pulsos, uno a las 18:00 horas y otro a las 2:00 de la madrugada. Este último generó las mayores consecuencias. Los efectos de la erupción fueron cenizas que cubrieron Ensenada con el colapso de techos y aluviones volcánicos o lahares, que son material que baja con mucha energía y arrasan con toda infraestructura”.
¿Está preparada la localidad de Ensenada para una nueva erupción?
“Afortunadamente Ensenada está a una distancia suficientemente lejana para recibir productos, que son los productos que más complican en una erupción volcánica, son los de mayor riesgo como son los aluviones volcánicos y las nubes calientes. Las nubes de ceniza que bajan, que tienen un nombre bastante técnico, que son los flujos piroclásticos, pero que bajan a muy alta velocidad y a muy alta temperatura. Este tipo de procesos ocurrieron en el año 2015 y no alcanzaron a llegar a la localidad de Ensenada”.
“Todo el registro geológico de miles de años indica que eventualmente algo de estos procesos que son más complejos podrían afectar la zona de Ensenada, pero necesitarían necesariamente una erupción mucho mayor, son erupciones más grandes. Las erupciones más grandes, afortunadamente ocurren menos recurrentemente. Entonces, ante ese tipo de fenómenos no hay mucha solución y la única posibilidad de resguardar a las personas es la evacuación”.
En Chile se monitorean los volcanes con el Observatorio Vulcanológico de los Andes del Sur. Creado para entregar una alerta temprana respecto de la actividad de los macisos. Existe un ranking de categorías, de verde a rojo, desde muy alto riesgo hasta bajo riesgo. Algunos parámetros a considerar son aumento en la sismicidad. Sernageomin vigila visual e instrumentalmente la evolución y comportamiento eruptivo de los principales volcanes activos del país.
Monitoréo al volcán Calbuco
“Por lo tanto es crucial el monitoreo del volcán, la vigilancia, el establecimiento de alertas tempranas que nos pueda decir alguna reactivación y que podamos dimensionar que es una erupción importante la que viene, tendría que evacuarse, no hay otra manera. No se pueden mitigar. Lo que sí podría ocurrir en Ensenada, nuevamente, es la caída de material piroclástico, que son las cenizas o son esta especie de piedrecilla que sale del volcán y que eso evidentemente que genera un riesgo de colapso de techos porque los techos en el país, en Chile, no están diseñados para soportar el peso de piedra molida que el fondo eso es lo que son las cenizas”.
“En un futuro evento, uno de los peligros de las erupciones es la caída de piroclastos en el camino de Ensenada a Ralún y la cuenca del lago Chapo. Los piroclastos son fragmentos volcánicos que el volcán expulsa a la atmósfera durante una erupción explosiva. Se clasifican de acuerdo a su tamaño y son capaces de fluir a grandes temperaturas y velocidades, arrasando con todo a su paso”.
¿La venta de parcelas en la falda del volcán Calbuco es una actividad prudente?
“Nosotros hemos publicado un mapa de peligros. Sugeriría que, bueno, cualquier persona es libre de adquirir un terreno, un sitio. Pero es prudente revisar la información que los servicios públicos, en este caso Sernageomin, ha publicado al respecto. Hay sectores que son más complejos o más susceptibles de ser afectados que otros. Sobre todo las zonas muy cercanas a los valles, los ríos. Esas son zonas que eventualmente se podrían ver afectadas en el futuro, sobre todo si se está acercando cada vez más al volcán”.
“También está la condición de la eventual caída de cenizas, entonces si se va a construir una cabaña, aunque como decía no está regulado el ángulo, por ejemplo, que deberían tener los techos, sí sería prudente considerar que, en el caso del volcán Calbuco, que es un volcán mucho más recurrente que el Osorno, eventualmente sí podría haber acumulaciones de cenizas. En ese sentido, quizás consultar lo que ocurrió el 2015, los espesores que se acumulan, porque hay cierto consenso internacional que con unos 10 a 15 centímetros de espesor, los techos más débiles ya empiezan a colapsar. Con 20 a 30 ya la mayoría de los techos colapsan. Es mucho peso. Entonces yo diría que es prudente revisar la infomación que existe publicada”.
Últimas erupciones
Las últimas erupciones relevantes del volcán Calbuco fueron en los años 1893, 1961 y 2015. En la última, la columna eruptiva fue de 15 km. de altura y duró casi un mes, según explicó Álvaro Amigo. Según Sernageomin, la erupción histórica más importante ocurrió en 1893-95. A partir de la cual, se comenzó a formar el domo que ha crecido hasta alcanzar el borde del escarpe originado por la avalancha.
“Esencialmente lo que entregan los mapas de peligro son zonificaciones. Es decir, ‘esta zona es de alto peligro’ y por supuesto que no es recomendable quizás en el largo plazo, porque en el largo plazo sabemos que podría ocurrir una erupción y afectar ese lugar. La problemática de esto es que los volcanes no hacen erupción todos los años. Por lo tanto se comienza a perder la noción de esta actividad. Por ejemplo Calbuco fue siete años atrás. Usualmente comenzamos a perder noción de la recurrencia y de los procesos. Pero sabemos, como especialista en vulcanología, sabemos que va a ocurrir una erupción en el futuro. Por lo tanto, lo que está interpretado como zona de alto peligro no es recomendable, por ningún motivo, generar ahí asentamientos”.
El Volcán Calbuco se encuentra dentro de la Reserva Nacional Llanquihue. Es un destino especial para quienes disfrutan de la alta montaña y el montañismo. Así, es un lugar adecuado para realizar cabalgatas, senderismo, fotografía, observación de aves y contemplación de flora y fauna nativa.
¿Qué pasa con el acceso libre al volcán?
“Cuando los volcanes están en tiempo de calma, dormidos por decirlo así, no hay ningún inconveniente. Solamente es cuando hay cierta actividad a nivel de cráter. No es el caso de los volcanes de aquí de la zona de Los Lagos, pero sí en La Araucanía. Por ejemplo, en el volcán Villarrica, el cráter del volcán Villarrica es muy activo y usualmente genera explosiones pequeñitas que no afectan a los pueblos como Pucón, Licanrray, Coñaripe, pero sí afectan los turistas que están en el cráter”.
“Por lo tanto, ahí hay una situación un poco más delicada que se tiene que manejar con Conaf, cuando son Parques Nacionales, o con los municipios. En el caso acá de Los Lagos, los cráteres de los volcanes en esta región no presentan, por el momento, se puede cambiar en el futuro, pero son cráteres sin mayor actividad interna, sin explosiones pequeñas”.