De víctimas a victimarios en secta Colonia Dignidad

Películas, series y documentales narran lo que sucedió al interior de la secta que fundó Paul Schäfer junto a colonos alemanes. Dos producciones recientes de cineastas chilenos retratan el dolor de las víctimas que se extendió a toda la comunidad de Parral. El documental “Cantos de Represión” y la película “Un lugar llamado Dignidad” invitan, a los amantes del séptimo arte, a mantener viva la memoria y rechazar la falta de amor en los perpetradores de horrendos delitos. 

10.06.2022
Por Constanza Hitschfeld
y Francisca Vargas

Dos largometrajes chilenos retratan el dolor extendido a la comunidad que generó el trauma de las víctimas de Paul Schäfer y sus cómplices, miembros de la secta más violenta conocida en el país. El predicador luterano fundó Colonia Dignidad en 1961 con un asentamiento de colonos alemanes en Parral región del Maule. Villa Baviera proyectó una linda fachada por décadas con un centro gastronómico, turístico y familiar que ocultó a otro de torturas y desaparición de personas.

Opresión, maltrato, esclavitud, abuso sexual, violación, medicación forzada, división de las familias, tráfico de armas, tortura y desaparición de personas. Oscuros recuerdos de las víctimas que Marianne Hougen-Moraga y Estephan Wagner exploraron al codirigir el documental “Cantos de Represión”. En tanto “Un lugar llamado Dignidad” de Matías Rojas, director de la película, retrató el paulatino paso de víctimas a victimarios que experimentó gran parte de los colonos.

Marianne Hougen-Moraga comentó que “los que desaparecieron allí adentro a través del explorar cómo se enfrentan, dentro de la colonia, hacia ese tema. El enfrentamiento es para varios, no para todos, pero para unos es casi no hablar de eso. Tratar de reprimirlo. Eso para nosotros también es contar cómo en realidad se reprime aún más dolor. Aparte del dolor que hubo ahí adentro, también el dolor que llevan otros involucrados que viven afuera”.

Colonia Dignidad es un caso extremo de secta donde no existió la proyección de perpetuar la comunidad más allá de la vida de su líder. En 1997 Paul Schäfer escapó hacia Argentina luego de mantener un régimen del terror durante 37 años.“Unos se convirtieron en los esclavos de Schäfer. Verdaderos autómatas atentos solo a obedecer sus órdenes, a trabajar sin descanso ni horario, y no disgustarlo. Él facilitó nuestra villa para la detención y opresión de personas perseguidas por el régimen. Nos damos cuenta de que se han cometidos graves delitos”, declaró Villa Baviera en 2006.

Estephan Wagner dijo que “la película trata de darles la voz a ellos pero ellos son muchos. Uno cree que la colonia es una sola y que todos son iguales y no lo es. Entonces justamente buscamos ver las distintas estrategias que distintos habitantes tienen para vivir con esa memoria y con esos traumas”.

“Uno sabe o uno cree saber bastante de la colonia. Entonces nosotros obviamente también teníamos ciertas ideas de cómo era y de qué era lo que había pasado. Lo que más nos interesaba en realidad era entender su lógica. Entonces era muy importante siempre recordarnos de no caer en lo que nosotros pensábamos, sino realmente mantenernos limpios y escucharlos y tratar de entenderlos a ellos”, agregó el documentalista.

Un lugar llamado dignidad

La película estrenada en cines hace unos meses muestra la historia de Pablo, un niño de 12 años de edad, que recibe una beca para asistir a una misteriosa y aislada escuela. Allí es testigo de la anulación de los comportamientos humanos naturales a partir de un constante adoctrinamiento por miedo, castigo y tortura. La obra, que utiliza un lenguaje teatral, presenta la cotidianidad de los habitantes de ese mundo cerrado que no conoce el exterior.

Matías Rojas explicó que “hay que tomar muy en cuenta que Colonia Dignidad es una secta particular. Muchos de los colonos llegaron cuando niños o nacieron al interior del lugar, lo que facilitó el control por parte del líder”.

“Fue un lugar protegido por la dictadura cívico militar en Chile. A tal nivel que se conformó como un estado dentro de un estado. Un micro país protegido al alero del dictador Pinochet y que, una vez terminada la dictadura, continúo su funcionamiento en democracia. Algo que se entiende actualmente debido al gran círculo de protección con el que contaba por parte de diferentes esferas de poder”, añadió el cineasta.

Paul Schäfer abusó sexualmente a niños de la colonia y fuera de ella. Incluso raptó y secuestró algunos que mantuvo en la villa. Al interior de la secta les prohibió hablar con sus padres, conocer a sus hermanos y tener todo tipo de relaciones sentimentales. Una vez adultos les impidió contraer matrimonio, procrear y convivir en familia o en libertad. El pederasta violó todos los límites físicos y emocionales de los niños y adolescentes adoctrinados para verlo como su única y exclusiva autoridad.

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